Hace unos meses entrevistamos en nuestro canal de YouTube a Helena Aranyó, Directora de Apartaments Cugat Natura, para hablar sobre los nuevos modelos de viviendas para personas mayores.

El envejecimiento es un proceso diverso y no todos experimentamos los mismos cambios. Lo mismo sucede con la vivienda: cada vez surgen iniciativas diferentes a las residencias convencionales para personas mayores.

Helena nos habló sobre el modelo de viviendas compartidas que se originó en países nórdicos y que está obteniendo excelentes resultados:

Nuevos modelos de viviendas para personas mayores

Envejecer en comunidad y ser atendido con servicios especializados para personas mayores es un concepto que ya se desarrolla desde hace muchos años en países nórdicos. La premisa es compartir espacios entre personas de la misma generación sin perder la privacidad ni la independencia.

Ante los nuevos retos que supone el envejecimiento y con el objetivo de ofrecer nuevas soluciones de bienestar, Cugat Natura apuesta por este modelo de vivienda compartida, siendo una iniciativa pionera en España.

Se trata de un complejo de 32 viviendas individuales adaptadas para personas mayores, diseñadas por interioristas especializados. Está ubicado en Sant Cugat del Vallés (Barcelona) y cuenta con 18.000 metros cuadrados. Se divide en dos partes: apartamentos y zonas de uso común. Los apartamentos disponen de cocina, sala-comedor, habitación doble, baño y terraza. En las zonas comunes se encuentran salas de cine, lectura e Internet, así como un bar y restaurante.

Con una cuota mensual, el residente tiene acceso a servicios como lavandería, limpieza diaria, conserje, mantenimiento y servicios asistenciales. También incluye actividades lúdicas, sociales y culturales.

Además, el centro pone a disposición otros profesionales, en caso de solicitarlo, como fisioterapeutas, entrenadores personales y otros.

Las ventajas de vivir en apartamentos para personas mayores

• Vivir en tu hogar dentro de un espacio seguro: En Cugat Natura, el residente puede decorar su apartamento a su gusto y elección. Mantiene su intimidad, pero vive en un entorno con atención médica disponible en caso de ser necesario, además de servicios especializados.
• Independencia y libertad: El residente tiene las llaves de su apartamento y completa libertad para entrar o salir del recinto, así como para recibir visitas cuando lo desee.
• Tranquilidad para las familias: Los hijos o familiares pueden conciliar su vida laboral y personal con el cuidado de sus padres, sabiendo que viven en un lugar seguro y bien atendidos.
• Cuota mensual fija: Con un precio cerrado al mes, el residente tiene acceso a todas las instalaciones y actividades.
• Hacer nuevas amistades: Al vivir con personas de la misma generación, se comparten gustos, hábitos y estilo de vida, lo que representa una excelente oportunidad para hacer nuevas amistades.

El futuro del envejecimiento en comunidad en el mundo y las ciudades más representativas

El envejecimiento de la población es un fenómeno global que está impulsando a las ciudades y países a replantear cómo apoyar a sus ciudadanos mayores. En todo el mundo, se están desarrollando modelos innovadores de vivienda y atención que promueven el envejecimiento en comunidad, combinando independencia con apoyo social y servicios especializados.

En los países nórdicos, pioneros en este enfoque, ciudades como Copenhague y Estocolmo han implementado exitosamente comunidades de viviendas compartidas para personas mayores. Estos espacios están diseñados para fomentar la interacción social, reducir la soledad y proporcionar un entorno seguro y adaptado a las necesidades de sus residentes.

En los Países Bajos, la ciudad de Ámsterdam destaca por sus iniciativas de “cohousing” intergeneracional, donde personas de diferentes edades conviven y comparten espacios comunes, enriqueciendo la experiencia comunitaria y promoviendo el apoyo mutuo.

En Japón, que enfrenta uno de los índices más altos de envejecimiento, ciudades como Tokio y Osaka están invirtiendo en tecnología y diseño urbano para crear entornos más amigables para las personas mayores. Esto incluye desde viviendas inteligentes hasta barrios enteros adaptados para facilitar la movilidad y la interacción social.

En Canadá, Vancouver es reconocida por sus comunidades sostenibles y programas que integran a las personas mayores en actividades sociales y culturales, promoviendo un envejecimiento activo y participativo.

Estas ciudades representan un movimiento global hacia la creación de entornos que permitan a las personas mayores vivir con dignidad, independencia y conexión social. El futuro del envejecimiento en comunidad pasa por adoptar modelos que valoren la experiencia y contribución de las personas mayores, integrándolas plenamente en la vida urbana y ofreciendo soluciones que mejoren su calidad de vida.